(Programa de radio Siendo Consciente del 26 de mayo de 2017)
Cuando alguien se va, cuando una relación concluye o cuando se despide a alguien del trabajo con frecuencia escucho la frase nadie es imprescindible, que me parece se dice más como una manera de consuelo que evite lo extrañemos. Estoy seguro que cuando una persona sale de un sistema, el sistema no necesariamente deja de funcionar, sin embargo, su salida o su sola ausencia alterará el sistema.
Si termina una relación laboral es probable que otra persona cubra esa posición y quien llegue traerá nuevas ideas y maneras de hacer las cosas, se relacionará de otra manera con las demás personas y aportará otros conocimientos y experiencia. El sistema habrá cambiado.
Si se decide no cubrir ese puesto de trabajo y que las funciones se repartan entre otros miembros del equipo, la manera de relacionarse entre ellos cambiará, el estado de animo será otro, cada quien harás las cosas de manera diferente a como las hacia quien se fue. El sistema habrá cambiado. ¿Seguirá funcionando? En la mayoría de los casos seguramente sí.
Más es importante que tengas en cuenta que cada quien tiene su propia manera de ver el mundo, de sentir y de actuar, de tal forma que la influencia que ejerces en tu familia, tu trabajo o tu grupo de amigos es única e irrepetible. Es casi un hecho que no serás indispensable para que esos sistemas subsistan, pero también es un hecho que las aportaciones que harías en ellos sólo tú podías hacerlas lo que te convierte en insustituible.
Teniendo en cuenta esto, piensa en esas personas que forman parte de tus sistemas, piensa en ellas como insustituibles y eso quizá te lleve a prestar atención a cómo su actuar contribuye a la manera en que esta funcionando el sistema, has consciencia de cómo son diferentes a ti y, sin embargo, merecen respeto.
Aprende a respetar a los demás y honrar sus contribuciones al sistema, date cuenta de cómo estás impactan en el objetivo y la manera de lograrlo, cómo organizan los recursos o bienes materiales, la manera en que sirven a los clientes o el entorno social, contribuyen a la construcción de la riqueza o utilidades, cómo son parte vital de los resultados y la manera en que interactúan con los demás.
Richard Branson dice que lo más importante no son los clientes, que lo más importante son los empleados y que si los cuidas, ellos se encargarán de cuidar a los clientes. No estoy seguro de que haya un elemento más importante que el otro en los sistemas, pero sé que cada uno es tan importante como el otro, y que el elemento de la gente debe tratarse con respeto a su individualidad y sus contribuciones.
Cuando interactúes con la gente, sin importar lo que dure elvínculo o lo profunda que sea, haz que todas tus relaciones sean valiosas para cada persona con la que cruces caminos.
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Por: Roberto G. Martinell
Psicólogo y Coach
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